Como traquea la madera cuando das los pasos
y no quieres ser notado,
el sonido se esparce por el piso
y recorre las superficies hasta chocar en ti.
Retumbo en tus oídos
y sabes que voy a llegar,
mi voz fuerte no se siente
porque mi pensamiento es más pesado,
que te hace sufrir por dentro de tu mente.
Son las cosas que se pierden cuando ves el reloj correr,
cuando la gota cae una y otra vez sin parar,
y golpea y golpea,
como si el martillo del herrero chocara tu cabeza sin parar.
¿Qué se siente?
Ahora que mi sombra crece,
mi mente se expande,
sentí la espada filosa cruzar mi corazón
mientras lloraba de rodillas sin saber que era.
¿Qué se siente?
Que la misma espada traspase tu cuello
y dejes de respirar lentamente,
todo en el mismo cuarto oscuro que construiste con tus manos
y yo deshago con mis pies.
Mariano Avilés Cisneros 23/09/2010
y no quieres ser notado,
el sonido se esparce por el piso
y recorre las superficies hasta chocar en ti.
Retumbo en tus oídos
y sabes que voy a llegar,
mi voz fuerte no se siente
porque mi pensamiento es más pesado,
que te hace sufrir por dentro de tu mente.
Son las cosas que se pierden cuando ves el reloj correr,
cuando la gota cae una y otra vez sin parar,
y golpea y golpea,
como si el martillo del herrero chocara tu cabeza sin parar.
¿Qué se siente?
Ahora que mi sombra crece,
mi mente se expande,
sentí la espada filosa cruzar mi corazón
mientras lloraba de rodillas sin saber que era.
¿Qué se siente?
Que la misma espada traspase tu cuello
y dejes de respirar lentamente,
todo en el mismo cuarto oscuro que construiste con tus manos
y yo deshago con mis pies.
Mariano Avilés Cisneros 23/09/2010
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