sábado, 30 de junio de 2012

Oscuro silencio...




Vamos a quebrar este silencio afuera,
porque esta noche,
te quiero odiar.

Si veo a través del agua,
sabes a dolor,
considerando que hay que terminar,
siento que esta noche te voy a detestar.

Esta noche si,
respiro y luego me robo el aire,
su aire me lo llevo,
me voy a alejar.

Si, hice mi propio hoyo,
ya no vale la pena ver las luces en el cielo,
recorto mis recuerdos y los pulverizo,
mis ojos vieron nacer
mi propio sufrimiento.

Se siente fluir adentro,
mi cuerpo lo dice,
oye el silencio...

Cállate!

Ahora no estoy equivocado,
no me conoces aún,
no hables sin saber,
nunca sabrás que iba a pasar.

Por todos los corazones que se quebraron,
por las verdades encontradas,
por los que creímos en el espacio y en el tiempo,
por los que nos llevamos la luna,
esta noche vamos a respirar
y te vamos a odiar.


Mariano Avilés Cisneros 29/06/2012

miércoles, 27 de junio de 2012

El último renglón de la historia.



Lo último que vi,
la hoja caer,
el polvo volar,
sin nada que contar,
me ahogue en lo azul del dolor,
me dejé llevar por la sonrisa,
sin intentar tratar,
sin saber que era lo mejor,
sin saber cual era el cambio,
ni que ocupé para seguir vivo aquí.

Hoy quisiera contarte que caminé por donde nunca quise,
y llegué donde soñé,
cambié lo que tenía,
sólo por llegar donde nunca pensé,
a alguna parte del mundo y que estuvieras ahí.

Hoy las cosas por las que tuve miedo ya no existen,
me fui de casa pensando en que no tenía nada,
y volví lleno,
viví lo que quería,
me volví a hacer.

Si dejé mis propios pasos perdidos fue para no volver,
la razón de estar aquí es que aprendí a
no repetir la misma vía en la que me perdí.

Un día más,
cerré el libro
y dejé la historia sin terminar.

Mariano Avilés Cisneros 13/06/2012

jueves, 14 de junio de 2012

Perdido en la nada




En mi hora más lúcida,
tuve un romance con mi propio sueño,
y entre mis días y mis noches,
me retorcí hasta desaparecerme,
en un cuerpo destrozado desperté,
como si no fuera el mismo,
nunca olvidaré ese instante.

Una última vez,
me vuelvo a ir,
pienso en no volver,
veo la luz del sol
y mientras me quema la piel
camino hacía él.

Oigo esa voz,
ese sonido,
no sabía que la oscuridad me hablaba,
estaba de rodillas,
y desperté,
no tengo nada
sólo quiero escapar.

Ahora que entierro lo que respiro,
inundo mi cabeza,
y me dejo caer hacía atrás,
lentamente me sumerjo
en la sangre que botó mi corazón.

Cuan largo tengo que estar?
para verlos huir.

Insignificantemente,
se lo llevó el viento,
seguí al hombre viejo
y me hundí lentamente.


Mariano Avilés Cisneros 13/06/2012

domingo, 10 de junio de 2012

Incompleto




Como cuando alguien te lo dice al oído,
como si lo hubieras visto en el espejo,
lo viste mil veces antes,
ahora no lo puedes creer.

Pasos inseguros,
respirando un aire frío en medio de la oscuridad,
subiste a ver el cielo,
una fuerte caída de espaldas,
sientes el veneno.

Como antes solía ser,
un pensamiento lleno de nudos,
una representación negra,
lo que verdaderamente eres,
lo que verdaderamente sientes.

Confusiones muy adentro,
pies destrozados de caminar sin sentido,
la voz no se percibe,
el último respiro.

Duele?
Si... te duele.

Arde fuertemente el corazón,
late hasta explotar,
hace falta ese elemento
y se acabo el sueño,
es la decepción.

Ahora,
simplemente sin entender se retrocede
a imagenes de sueños que quisieras convertir,
ahora más que nunca esto está incompleto.

Mariano Avilés Cisneros 10/06/2012